La conspiración de la industria del fitness

Todo el mundo está preocupado por su salud, y más todavía por su apariencia física. Sin embargo, el hecho de que algo nos preocupe no implica que nos tomemos la molestia de aprender sobre ello.

Mucha gente está también preocupada por el dinero y nunca en su vida ha hecho el mínimo esfuerzo por aprender a invertir. En el ámbito de la salud ocurre lo mismo. La gente sabe que es importante, pero basa su educación en los mensajes que recibe de la industria, de la televisión, de las revistas de actualidad y de las celebridades.

Es decir, la ignorancia nos hace fácilmente manipulables, y por tanto fácilmente explotables.

¿Y qué es lo que nos dice la industria del fitness?  Nos dice que es necesario ir al gimnasio, tomar muchos suplementos y productos detox, ejercitarnos con máquinas de musculación, comer productos light y correr en cintas mientras vemos videos musicales. En resumen, quiere que pienses que los necesitas y, lo principal, quiere que consumas sus productos.

Para darse cuenta de cómo nos manipula la industria no hay más que ver la distribución de un gimnasio tradicional. El 40% del espacio está dedicado a máquinas de ejercicios, otro 40% a máquinas de cardio (cintas, elípticas…), con suerte un 10% a pesos libres (mancuernas, barras…) y otro 10% a zona de estiramientos, colchonetas…

Juzgando por esta distribución, uno pensaría que la mejor manera de estar en forma es utilizando máquinas de ejercicios y máquinas de cardio. Sin embargo,  cualquier persona con un mínimo conocimiento de cómo funciona nuestro cuerpo sabe que no es cierto. Los dueños de los gimnasios y los fabricantes de suplementos saben que no es cierto, pero les conviene que tú sí lo creas.

Las máquinas de cardio solo trabajan una dimensión de lo que significa estar en forma (resistencia cardiovascular), y además de una manera muy ineficiente. Las máquinas de musculación trabajan tus músculos de manera aislada, de una manera totalmente diferente a como son utilizados en la vida real, de manera contraria a como evolucionamos, sin considerar que en la realidad nuestros músculos trabajan de manera coordinada, y nuestro cuerpo se esfuerza en evitar desproporciones.

¿Y por qué está organizado así? Me imagino que sabes la respuesta. Es más rentable para todas las partes:

  • Los fabricantes de máquinas hacen equipamiento cada vez más avanzado, con más funcionalides, con displays digitales, con memoria, con voz… La vida media de estas máquinas es de pocos años, bien porque se estropean o porque salen modelos más avanzados, y cualquier gimnasio que se precie debe tener los nuevos modelos. Es decir, haciendo creer a la gente que estas máquinas son una buena forma de estar fit generan ventas recurrentes de máquinas que cuestan miles de euros.  Si la gente supiera la realidad, que ejercitarse con pesos libres es mucho más eficiente, ¿cuánto crees que bajarían sus ventas? Si tu abuelo tuviera unas pesas de los años 50, o una kettlebell rusa de la segunda guerra mundial (básicamente una bola de acero con un asa) podrías seguir utilizándolas sin ningún problema 60 años después, y de hecho se las podrías dejar a tus nietos y podrían seguir obteniendo todos los beneficios que ofrecen. Sin embargo, para la industria esto significaría pocas ventas y además de artículos baratos (al fin y al cabo estamos hablando de bloques de hierro).
  • Los gimnasios también prefieren que los usuarios utilicen las máquinas, porque cualquiera las puede utilizar sin miedo a lesionarse y sin tener que invertir en entrenadores bien formados. Piensa que un gimnasio tiene entre 8 y 10 veces el número de miembros que sus instalaciones podrían soportar. Les interesa por tanto nutrirse de gente con poco interés, gente que se ve forzada por su médico a ir al gimnasio a hacer ’30 minutos de cardio y unos ejercicios en las máquinas’, gente que necesita que todo se vea fácil y seguro, y que pasarán poco tiempo en el gimnasio. De hecho les interesa que no vean demasiados resultados, así tienen la excusa perfecta para ir pocas veces, permitiendo al gimnasio tener más miembros que pagan y que apenas van, negocio perfecto.
  • Las revistas especializadas, que muestran modelos con cuerpos perfectos (o lo que Tommy Hilfiger, Calvin Klein y compañía nos quieren hacer creer que es un cuerpo perfecto), y que viven en realidad de la publicidad. El 40% de las páginas están dedicadas a promocionar suplementos, ropa deportiva y otros cientos de artículos que poco harán por mejorar tu estado físico. Lo que quieren es que compres, las revistas y lo que anuncian.
  • Los entrenadores son también parte importante de esta gran conspiración. Algunos participan de ella de manera inconsciente, realmente creyendo que hacer un circuito por varias máquinas y terminar haciendo 20 minutos de cardio es lo ideal para mejorar tu condición física. Otros saben que es absurdo, pero es fácil y seguro, y no les interesa dar más información de la necesaria a sus clientes, quieren que les necesiten para que sigan pagando por sus servicios. Los entrenadores que más saben no están en los gimnasios tradicionales.

La realidad es que la información que necesitas para estar en forma no es mucha, pero es muy distinta a la que la industria te proporciona.

Algunas grandes verdades que la industria no quiere que sepas:

  • El cuerpo es un todo, no hagas ejercicios de aislamiento para intentar moldear un músculo concreto. Utiliza ejercicios compuestos que trabajan coordinadamente múltiples grupos musculares. Trabaja como un gimnasta o un atleta, no como un culturista.
  • La forma óptima de hacer ejercicios compuestos es mediante pesos libres o con ejercicios corporales, usando tu propio peso para ofrecer resistencia a los músculos.
  • La fuerza es la piedra angular del condicionamiento físico. Es la base de todo, tanto en hombres como en mujeres, y te permitirá lograr el resto de tus objetivos (perder peso, ganar masa muscular, resistencia…).
  • Hacer largas sesiones de cardio genera una especialización en tu cuerpo sobre una única dimensión, la resistencia cardiovascular, pero hace muy poco por (o va en contra de) otros elementos del fitness (fuerza, potencia, equilibrio, coordinación…). Además los impactos continuos sobre las articulaciones pueden provocar lesiones a largo plazo.
  • Debes seguir un programa, hacer ejercicios aleatorios sin un plan definido no suele generar resultados.
  • Debes comer comida de verdad, un tema del que hablaremos en futuros artículos (como este).
  • No necesitas muchos suplementos. Solo unos pocos aportan algo, como proteína de suero y creatina.

La única manera de desmantelar esta gran conspiración es con una revolución del fitness, y por eso empiezo hoy este blog ¿te únes?

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