El motivo principal por el que debemos entrenar es para funcionar mejor en el mundo (sí, incluso más importante que para lucir un buen cuerpo en la playa 🙂 ).
Sin embargo, el gimnasio no es un buen reflejo del mundo real, especialmente el gimnasio convencional con todas esas máquinas antinaturales.
Es perfectamente posible estar en muy buena forma física haciendo únicamente ejercicios corporales en la comodidad de tu casa, pero el fitness que yo propongo no se trata sólo de estar en forma, sino de divertirse en el proceso. Es lo que yo denomino slow fitness, y tiene como premisa desarrollar entrenamientos variados, alineados con la forma en la que evolucionamos, con movimientos naturales que nos permitieron sobrevivir hasta el día de hoy y que siguen siendo los que necesitamos practicar para mantener nuestro cuerpo sano y fuerte.
Por eso me gusta incorporar en los entrenamientos artefactos y métodos poco convencionales, pero que funcionan mucho mejor que cualquier máquina de gimnasio, y que además son mucho más divertidos.
Por ejemplo, mete una kettlebell en el maletero de tu coche y vete al campo o a la playa. Sin miedo de que se caiga sobre el suelo de tu casa podrás arriesgarte a practicar nuevos movimientos!
Agrupo el resto de métodos que te cuento hoy (todavía menos convencionales que el kettlebell) en tres categorías: levanta cosas, empuja cosas, arroja cosas. No suena tan sexy como power fitness, P90X, Turbulence o TRX, pero no encontrarás nada que te ofrezca mejores resultados.
Levanta cosas (irregulares)
Uno de los problemas de la gente que únicamente entrena con pesas, es que su cuerpo se acostumbra a levantar objetos perfectamente equilibrados; Las cosas en la naturaleza son un poco diferentes, y la mejor manera de desarrollar un cuerpo funcional es levantar de vez en cuando objetos irregulares, que obliguen a los músculos estabilizadores de tu cuerpo a emplearse al máximo y adaptarse a requerimientos de fuerza asimétricos.
Hay algo más básico que ir al campo y levantar piedras?
Una alternativa un poco menos ‘salvaje’ pero igual de efectiva es el saco de arena o sandbag, muy de moda en los entrenamientos funcionales; esto ha hecho que se comercialicen ya sandbags ‘profesionales’, que cuestan más de 100 dólares; sin embargo es muy fácil hacerse uno casero (pista: necesitas un saco y arena :)), y las posibilidades que permite son infinitas. Por ejemplo, agarra un saco de arena y camina con él durante 100 metros, repite 5 veces. Así dicho no parece muy difícil, pero te aseguro que te obligará a trabajar músculos que ni sabías que existían.
Si puedes conseguir una rueda grande usada de camión tienes acceso a una gran herramienta para estar en forma. Combina levantamiento de peso muerto y press de banca en el mismo ejercicio, con la ventaja de tratarse de un objeto móvil que te obliga todavía más a utilizar tu core para estabilización (para tu info, la rueda del video pesa más de 200Kg!!).
Empuja cosas
Carga un trineo de pesas y arrástralo. O más fácil, ata una cuerda a una rueda, métele algo de peso en su interior y tira de ella, primero atado a tu cintura y después atrayendo el peso hacia ti con los brazos.
Lleva tu auto a un estacionamiento y empújalo, haz varias series de 100 m. Es recomendable que alguien lo dirija desde dentro :). Esto trabaja casi todos los músculos de tu cuerpo, y además ahorras gasolina.
Tienes acceso a una carretilla? cárgala y camina un rato con ella. Mantén los hombros tensos y el cuerpo recto, es el complemento perfecto para el ejercicio anterior.
Lanza cosas
La potencia es uno de los elementos clave de lo que significa estar fit, y la mejor forma de entrenar la potencia (velocidad x fuerza) es aplicando velocidad a pesos. Por ejemplo arrojar piedras lo más lejos posible y desde diferentes ángulos es un gran entrenamiento de tu potencia, ya que requiere utilizar tus músculos de manera explosiva.
Golpear un martillo contra una rueda es otro gran ejercicio para desarrollar tu potencia, aparte de para liberar estrés :).
Combina todo a la vez
Por último, os dejo con un video que combina varios de los anteriores, es un entrenamiento que sólo dura 3 minutos y 33 segundos, pero seguro que poca gente de tu gimnasio lo aguantaría!
Entrena para la vida! recuerda que la forma sigue a la función.
El aire libre y la vitamina D que generarás por la exposición al sol te ayudarán también a obtener más beneficios del ejercicio físico.
Y sobre todo, diviértete!
PD: ¿Quieres conocer otra filosofía para entrenar en la naturaleza? Prueba MovNat.