«La pregunta no es quién me va a dejar, sino quién me va a detener» – Ayn Rand
Guerrera Espartana ya tiene fecha de lanzamiento: 20 de noviembre.
En un artículo anterior resumí el gran problema que enfrentan muchas mujeres a la hora de mejorar su salud y su cuerpo. Hoy profundizamos en la filosofía de Guerrera Espartana y damos comienzo a la cuenta atrás.
Al final del artículo está la información para hacer ya tu reserva, aprovechar la promoción de lanzamiento y ¡ser parte de este movimiento!
¿Qué es una guerrera espartana?
Con Guerrera Espartana pretendemos regresar a los conceptos clásicos de fuerza y belleza femenina, antes de que la talla o las medidas fueran tan relevantes para la identidad de la mujer, cuando ella no sabía cuánto pesaba, ni le importaba.
Desde luego no todas las sociedades clásicas eran iguales, por eso merece la pena echar un vistazo a Esparta.
La mujer en Esparta
Al contrario que en otras sociedades de la época, la educación de las niñas en Esparta era muy similar a la que recibían los niños, incluyendo el entrenamiento físico.
Muchos textos antiguos hacen alusión a la mayor altura de las espartanas comparadas con el resto de griegas. La explicación más probable es que la mayoría de sociedades reservaban los mejores alimentos, y especialmente la carne, para los hombres, pero esta discriminación no se daba en Esparta.
Las mujeres estaban bien alimentadas. Los espartanos sabían que debían crear mujeres fuertes para procrear ciudadanos fuertes. Una mujer muy delgada estaba mal vista, era señal de enfermedad.
Las mujeres participaban en competiciones gimnásticas, luchas, carreras a pie y a caballo. En la celebración anual de la Gimnopedia, tanto mujeres como hombres mostraban su destreza y su belleza física. Había bailes y duros ejercicios de resistencia.
Las mujeres competían incluso en los Juegos Olímpicos, en las mismas categorías que los hombres. Destacó Cinisca, una princesa espartana, al imponerse en la carrera de carros (cuadriga) a todos los hombres. Es la única mujer de la antigua Grecia ganadora de una competición olímpica.
Las espartanas no destacaban solo por sus capacidades físicas. Eran conocidas por su intelecto, ingenio y fuertes opiniones sobre los temas relevantes de la época. Se les educaba para pensar y debatir.
Al contrario que en el resto de Grecia, la mujer participaba activamente en la vida social de Esparta y podía poseer tierras, el mayor símbolo de riqueza en aquel entonces. Desde pequeñas aprendían a montar a caballo y dirigir carros, que utilizaban para controlar sus tierras. Podían divorciarse libremente de su marido sin perder su patrimonio personal.
La mujer espartana se identificaba con la famosa Helena de Esparta. No solo era considerada la mujer más bella del mundo, sino que controlaba su propia riqueza y dominaba a los hombres.
Reglas para la mujer moderna
Avancemos unos miles de años hasta la sociedad moderna. Afortunadamente las mujeres tienen los mismos derechos legales que los hombres en los países desarrollados, pero lo que se espera de cada sexo en el aspecto físico es muy distinto.
De un hombre se espera fuerza y dedicación, entrenamiento duro y esfuerzo. A la mujer se le bombardea con ideales de belleza extremadamente delgados. Se le recomienda comer poco y realizar actividades físicas de baja intensidad.
Pero el cambio de paradigma que proponemos va más allá de lo físico. En su esencia, Guerrera Espartana persigue convertirte en una mujer sexy, saludable, fuerte y feliz.
Ser Sexy
Debes esforzarte por ser la mejor versión de ti misma, y eso incluye tu físico. Ser sexy es bueno. El error es pensar que tu mejor físico debe parecerse al de una portada de revista. Una guerrera espartana no persigue un patrón de belleza predefinido, tiene el suyo propio.
Si tienes caderas anchas, ningún entrenamiento ni dieta puede cambiarlo. Pero ganar músculo y quemar grasa mejorará enormemente tu figura.
Una modelo de pasarela no es necesariamente sexy. La mayoría tiene un bajo porcentaje de grasa, pero también poco músculo. El resultado es un entorno hormonal disfuncional y un metabolismo averiado.
Ser sexy no es sólo un físico, es una actitud. Tiene más que ver con tu personalidad y autoconfianza que con tu talla de pantalón.
En palabras de Courtney Martin: “¿Sabes lo que es poderosamente sexy en una mujer? Sentido del humor. Deseo de aventura. Una salud vibrante. Caderas donde agarrarse. Confianza. Humildad. Apetito. Intuición. Ingenio… una mujer que sabe lo bella que es.”
Nada que añadir.
Ser Saludable
Muchas mujeres sacrifican su salud en búsqueda de una idea artificial de belleza. Siguen dietas bajas en calorías y altas en productos “light” procesados, pasan horas haciendo cardio e inútiles máquinas de gimnasio.
El resultado es descompensación hormonal y metabólica, problemas en el control de la glucosa, hipotiroidismo, trastornos menstruales, osteoporosis, bajos niveles de energía, hambre y cansancio constante.
No es forma de vivir.
Guerrera Espartana mejorará tu cuerpo, pero también tu salud. Estar saludable es el primer paso, y todo empieza equilibrando tus hormonas y tu metabolismo. Al contrario de lo que muchas piensan, no se trata de comer menos y entrenar más, sino de comer mejor y entrenar mejor. Calidad antes que cantidad.
Intentar mejorar tu cuerpo simplemente perdiendo peso, comiendo poco y corriendo mucho, es una receta para el desastre. Es el resultado de poner la imagen por delante de lo verdaderamente importante, tu salud y tu desempeño (lo que tu cuerpo puede hacer).
Suficiente músculo y un sistema reproductivo saludable aumentan tu tasa metabólica. Podrás comer más y tendrás energía de sobra para entrenar. Podrás disfrutar tu comida y tu vida.
Ser Fuerte
La mujer promedio no está interesada en ganar músculo, y por ello suele huir de los entrenamientos de fuerza. Es un error. Todo hombre sabe lo difícil que es ganar un poco de músculo, y celebra cada gramo extra que consigue. Una mujer lo tiene todavía más difícil. Es un motivo adicional para intentar ser más fuerte.
El músculo es lo visible, pero si fortaleces el músculo, también fortaleces la infraestructura que lo soporta, principalmente tus huesos. Entrenar tu fuerza es la mejor manera de prevenir la osteoporosis. Ningún suplemento de calcio se acerca a los resultados que obtendrás al usar de verdad tus músculos.
La mujer promedio pierde un 5% de su musculatura cada década a partir de los 30 años. Menos músculo implica un metabolismo más lento, y contribuye a una ganancia media de casi un kilo de grasa al año. Esta debilidad estructural, junto con la pérdida gradual de equilibrio y estabilidad, es la causa de múltiples caídas y accidentes. El resultado es una entrada temprana al geriátrico.
Si quieres evitar el destino de la “mujer promedio”, no seas una mujer promedio. Actúa diferente, trabaja tu fuerza.
Una guerrera espartana no utiliza la báscula como principal indicador de progreso, sino la fuerza. Si hoy levantas más peso que ayer, estás mejorando. El peso que añades a la barra es más importante que el peso en la báscula. Con el tiempo, el cambio en tu físico será inevitable.
Algunas mujeres no quieren ser fuertes por miedo a intimidar a los hombres. Esto es absurdo. Una mujer fuerte sólo intimida a un hombre débil. Fuerza es belleza real.
Ganar fuerza no solo mejora tu físico, también la confianza en ti misma. La industria del fitness no busca empoderar a la mujer, simplemente le dice qué hacer para encajar en el prototipo esperado. Venden una imagen, Guerrera Espartana propone una filosofía.
No hablo únicamente de fuerza física, también mental y emocional. Todo está conectado. Ser fuerte implica no ceder ante la presión social y los intentos de manipulación de la industria para que uses sus productos o adoptes sus estándares de belleza. Ser fuerte implica priorizar tu salud y tu cuerpo, no la comodidad y el placer temporal. Ser fuerte implica tener confianza en tus capacidades y perseguir tus sueños por encima de todo.
Ser una guerrera espartana no es fácil, pero merece la pena. Nadie recuerda a las mujeres que siguen las reglas.
Ser Feliz
Cada vez hay más mujeres en cargos de responsabilidad, presidentas de naciones y de grandes compañías. La llamada liberación de la mujer ha sido sin duda un cambio positivo para la sociedad. Y sin embargo, la mayoría de estudios reflejan a una mujer cada vez más infeliz e insatisfecha. Las mujeres toman el doble de fármacos contra la ansiedad y la depresión que los hombres. Algo falla.
Las opiniones de psicólogos y sociólogos son dispares: ¿Mayor presión para encajar? ¿Necesidad de triunfar fuera de la casa y mantener a la vez el orden dentro de la casa? ¿Excesiva preocupación por su imagen?
No tengo la respuesta, pero probablemente todo lo que hemos resumido hasta ahora contribuya al problema.
Hay además dos aspectos particulares de la mujer que juegan en su contra:
- Estrés: La mayoría de mujeres tienen más estrés en su vida hoy que hace 40 años y, fisiológicamente, la mujer tolera peor el estrés que el hombre. Por ejemplo las hormonas sexuales femeninas son muy sensibles al estrés, tanto emocional como fisiológico.
- Peor autoimagen: Las mujeres tienden a hacer muchos más comentarios negativos sobre su cuerpo que los hombres. El resultado es menos satisfacción en su vida, menos confianza y, en algunos casos, peligrosas obsesiones. Empieza mirando hacia dentro. Lo que te dices a ti misma importa. No puedes llevar una vida positiva con una mente negativa. La obsesión no refleja dedicación. El esfuerzo es necesario, el sufrimiento no. El autocastigo no es una virtud.
Sé flexible. Tu cuerpo debe estar al servicio de tu vida, y no tu vida al servicio de tu cuerpo. Si no disfrutas el proceso, no merece la pena. Comer bien y cuidar tu cuerpo debe ser una elección, no una imposición.
Una guerrera espartana se esfuerza, pero disfruta la lucha. Ama el cuerpo que tiene mientras persigue el que quiere. Su objetivo es ser feliz, no ser perfecta.
Hay cosas más importantes en la vida que estresarse por lograr el nivel óptimo de grasa corporal, las proporciones perfectas de glúteos y el vientre más plano del planeta. Pero irónicamente, disfrutar el proceso aumentará tus probabilidades de acercarte a todo lo anterior. Este programa te mostrará el camino.
Buena alimentación, actividad física adecuada y suficiente descanso son el mejor “fármaco” contra la depresión y la ansiedad. Acompáñalo de la mentalidad adecuada y serás invencible. Tendrás en tus manos el elixir de la felicidad. Recuerda que la curva más bonita de una mujer es su sonrisa.
Esperamos que Guerrera Espartana sea una bocanada de aire fresco en el sofocante mundo del fitness femenino. Moderación, sostenibilidad, equilibrio, paz. Este es el camino, y el destino.
EL LANZAMIENTO
Pasando de la filosofía a la práctica. Esto es lo que encontrarás en Guerrera Espartana:
- Enfoque de nutrición según objetivos y fases del entrenamiento.
- Menús de ejemplo.
- Detalle de ejercicios. El programa está basado en los grandes movimientos con barra, complementado con ejercicios corporales, sesiones de intervalos de alta intensidad y cardio estratégico.
- Programa de entrenamiento de 6 meses, estructurado en 4 grandes fases. El objetivo principal es fortalecer musculatura y reducir grasa.
- Personalización del entrenamiento según tu forma natural: pera (acumulación de grasa en caderas), manzana (acumulación de grasa en estómago) o espárrago (pocas curvas).
- Recomendaciones para ajustar la alimentación y entrenamiento a lo largo del ciclo menstrual.
- Comunidad privada de apoyo.
- Y mucho más.
¡Espero que seas parte de Guerrera Espartana!
Nota 20/11: Ya terminó la promoción de lanzamiento, pero puedes conseguir el Programa completo aquí.